La costa sur de la isla tiene preciosas calas de arena blanca y aguas transparentes de color turquesa. Algunas no son de fácil acceso y has de caminar para llegar a ellas, pero merece la pena.
Desde Menorca Rentals te proponemos una ruta en la que conocerás algunas de las calas vírgenes más escondidas y bonitas: desde Binigaus hasta Cala Fustam donde podrás descansar a la sombra de los pinos.
Coge el coche y dirígete a Santo Tomás. Si lo dejas en el aparcamiento de la urbanización, en 10 minutos estarás en Binigaus, la playa virgen más larga de Menorca. Aprovecha y date una buen chapuzón para comenzar fresco el recorrido que, por el Camí de Cavalls, te llevará hasta Cala Escorxada.
Esta cala te asombrará por su fondo arenoso y limpio y las aguas claras. Aprovecha para hacer snorkel entre las rocas de los acantilados.
Un paseo de 10 minutos y encontrarás Cala Fustam, pequeña y solitaria, rodeada de vegetación. Un sueño que podrás disfrutar antes de volver a Binigaus a ver la espléndida puesta de sol.
El recorrido, ida y vuelta, supone unas dos horas andando. Recuerda que has de cerrar las barreras que te encuentres por el camino. Lleva agua y calzado adecuado. Y si vas a pasar el día, no olvides que son calas vírgenes donde no hay ningún servicio.
¿Quieres conocer el paraíso? Anímate a hacer esta excursión y déjate seducir por el paisaje virgen que descubrirás.